El empleo que se perdió por la pandemia por Covid-19 tardó dos años en recuperarse; sin embargo, el 48% de esas fuentes de trabajo se han registrado en la informalidad, informó la Organización Internacional del Trabajo (OIT) al presentar el informe Panorama Laboral 2023 en donde analiza los mercados de trabajo de América Latina y el Caribe.

En conferencia de prensa, Claudia Coenjaerts, directora regional de la OIT para América Latina y el Caribe y Roxana Maurizio, experta en mercados de trabajo, detallaron que a mediados de 2023 la tasa de informalidad regional (promedio de 11 países) fue de 48%; pero hay países en la que aún es mayor al valor promedio alcanzando, en algunos casos, del 70 por ciento.

México se encuentra entre los 5 países con tasas de informalidad más elevadas con más de 50% de su mercado laboral; en donde las mujeres tienen la mayor participación.

Detallaron que en la medida en que no se genere una cantidad suficiente de ocupaciones formales en relación con el potencial aumento en la oferta laboral el riesgo de aumentos persistentes en la tasa de informalidad laboral continúa.

“Ello se vuelve más crítico en el contexto actual de fuerte incertidumbre y de ralentización del crecimiento económico. De ahí la importancia de implementar o escalar políticas no sólo para sostener el empleo formal sino para apuntalar la creación de nuevas ocupaciones de este tipo en la región”, dijo Maurizio.

Asimismo Coenjaert se refirió al poder adquisitivo de los salarios, el cual se ha visto disminuido “tanto mínimos como promedio, es un desafío que impacta negativamente en la calidad de vida de las familias latinoamericanas y caribeñas. A pesar de la recuperación del empleo, la masa de ingresos totales laborales aún es inferior a los niveles prepandemia”.

Tras señalar que para 2023 se estima una tasa de desempleo de 6.3% y para el próximo año puede llegar a 6.8%; destacó que la participación en el mercado laboral muestra que no todos los trabajadores volvieron, incluso es menor dicha participación en 6.5 por ciento.

Además, la comparación de las tasas de ocupación promedio del primer semestre de 2023 con igual período del año 2022 (promedio de 16 países), arroja un alza de sólo 1 por ciento. “Más preocupante aún es la comparación entre el primer semestre de 2023 y el segundo semestre de 2022 donde la diferencia es negativa en alrededor de 1 por ciento”.

El informe de Panorama Laboral 2023, que cumple 30 años, destaca que la evolución reciente del empleo también ha exhibido diferencias a nivel sectorial. “En particular, salvo el empleo en el agro y la construcción, el resto de los sectores exhibieron variaciones positivas entre 2022 y 2023. Destaca en esta dinámica el aumento del empleo en el sector de transporte, los servicios financieros y los servicios de salud”.

Respecto a la participación de las mujeres, a nivel regional la recuperación del empleo continuó “exhibiendo una intensidad mayor a la experimentada por el empleo masculino. Mientras que para las mujeres la tasa de ocupación aumentó 23% entre el segundo trimestre de 2020 y el segundo trimestre de 2023, para los hombres ese incremento fue de 17 por ciento”.

De manera similar, también fue más intensa la recuperación de la oferta laboral de las mujeres con relación a la de los hombres (16.2 y 10.8%, respectivamente). La brecha de participación entre el segundo trimestre de 2023 respecto de igual período de 2019 era similar para ambos sexos.

Sin embargo, a pesar de este comportamiento favorable, las brechas laborales por género son persistentes y continúan siendo muy elevadas. “En el segundo trimestre de 2023 la tasa de participación laboral femenina regional fue 51%; 23 puntos porcentuales inferior a la de los hombres que es del 74%. La tasa de desocupación fue 7.6% y 5.6%, respectivamente.